viernes, 1 de mayo de 2015

EDITORIAL

La policía llegó a la calle indicada, bajaron los elementos reportando al mismo tiempo por radio que habían llegado; otras cuatro patrullas se estacionaron detrás de la primera, tocaron la puerta gritando que abrieran.
Una anciana que se sostenía en andadera para adultos abrió sorprendida, le preguntaron su nombre y al decirlo confirmaron que era la persona que buscaban.
De inmediato le mostraron un documento y abrieron paso los demás policía entrando a la casa.
La anciana pedía explicaciones, una mujer ofician le leía el documento.
La anciana fue expulsada de la casa donde vivido por muchos años.
Días antes uno de sus hijos la había visitado con el pretexto de saludarla y de hacerle firmar unos papeles con el propósito de buscarle un seguro para cuando recayera por sus innumerables enfermedades.
Nunca supo que lo que firmaba era la cesión de derechos de la propiedad a su hijo que había enviado a la autoridad para que sacarán a su madre de la casa.
En Tecomán existen casos donde incluso los nietos se aprovechan del amor que la abuelita les tiene para engañarlas a que firmen las escrituras a su favor para después sacarlas, otros se comprometen a tenerlas ahí hasta que mueran pero una vez firmada la escritura exigen que se salgan. Hay incluso, la promesa de la compra venta que una vez firmada la escritura a favor del nieto, se niegan a pagar la propiedad.

FELIZ DIA DE LAS MADRES.-
Así, pasarán muchas ancianas madres de familia, en la calle, en los asilos, pidiendo limosna o de arrimada con otro de sus hijos responsable y que tampoco imaginó que su hermano o hermana despojara a su propia madre de su casa.
Este diez de mayo, recordará con tristeza la mala fe de su hijo.
Hay casos peores, donde sólo tuvieron un hijo o les queda un hijo porque los demás ya fallecieron y ese es precisamente quien utilizó la ley para correrla, esas mujeres no tienen nada que celebrar el próximo día de las madres, será día de sufrimiento para ellas.
Se pueden contar muchas historias verdaderas al respecto, donde los hijos no han comprendido el cuarto mandamiento de la ley de Dios “Honrarás a tu padre y a tu madre”.
Hay hijos que abusan de los padres, sin conciencia ni responsabilidad arrojados a sus caprichos e intereses. Hay nietos y Tecomán, no es la excepción, los abogados pueden dar fe de esto, que se aprovechan de sus abuelos para engañarlos a firmar la escritura a su favor y luego sacarlos con mandato judicial.
En parte son los padres-abuelos quienes llevan responsabilidad de estos actos de sus hijos o nietos, por haberlos educado así, por permitirle tenerlos en su casa, críarlos y confiarse de ellos.
La madre, en su gran mayoría que son seres llenas de amor, por todo lo que hacen para sus hijos, terminan en la calle, por su esposo, tuvo un hijo o nieto consentido que la dejó en la calle y que nunca esperaron eso.
La historia que se comienza en este Editorial, es con la finalidad de reflexionar, por un lado la madre, para que éste ejemplo le permita no confiarse cuando firma un documento y que el hijo o nieto sean consciente y reflexione sobre lo que dice el cuarto mandamiento de Dios, para que éste y todos los diez de mayo, será un fecha para celebrar el día de las madres y disfrutarlo con una convivencia, paseo o misa para agradecer a Dios.

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