Un padre enfurecido, un arma de fuego y cinco balazos se conjuraron para colmar de drama el mediodía de este sábado. Un entrenador de basquetbol infantil fue la víctima de un incidente despiadado, a quien asesinaron por dejar fuera de un equipo a una de sus jugadoras.
El entrenador y un padre de familia discutieron afuera de los campos deportivos de Ciudad Universitaria porque una niña había sido excluida del equipo. La discusión subió de tono y el hombre envuelto en ira desenfundó una pistola y le disparó al coach de los “Dragones” en al menos cinco ocasionas.
El profesor de educación física se desplomó. El agresor paró el taxi marcado con el número 120 y placas de circulación 55-75-SJH del estado de Oaxaca del sitio Viguera el en que huyó rumbo a ´Símbolos Patrios, donde descendió del vehículo en la esquina con Fresnos y le perdieron la pista, según narró el conductor del taxi.
En tanto, en la escena del crimen todo fue llanto y sangre. La familia del profesor Guillermo Audelo no pudo contener el dolor de la pérdida y sollozaron alrededor del cuerpo inerte de la víctima.
Un poco más lejos, alrededor del área acordonada, niños vestidos con un uniforme deportivo azul marino con vivos en verde también lloraban la muerte de su entrenador.
Compañeros de trabajo de Guillermo Audelo también llegaron al lugar y, luego de platicar con un par de testigos del crimen, supieron que había sido uno de los padres de familia el presunto responsable del crimen, y señalaron a Angélico Reyes Altamirano como el sospechoso del homicidio, quien tiene a dos hijos en la escuela primaria donde trabajaba el ahora fallecido.
Guillermo Audelo tenía 33 años y desde hace cuatro era profesor de educación física de una escuela primaria, donde formó el equipo de basquetbol “Dragones” que este sábado tenía enrolados cuatro partidos en diferentes categorías.
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